La maternidad subrogada, también conocida como gestación subrogada, es un procedimiento de reproducción asistida que se caracteriza porque la mujer que lleva a cabo la gestación no será la madre legal del bebé tras su nacimiento. Este método, regulado de manera diversa en diferentes países, plantea reflexiones tanto éticas como legales debido a las implicaciones en las que intervienen múltiples partes.
En España, la maternidad subrogada no está permitida según lo establece el artículo 10 de la Ley 14/2006, de 26 de mayo, sobre técnicas de reproducción humana asistida. Sin embargo, muchas personas que desean emprender este camino se ven en la necesidad de explorar las normativas de otros países donde este procedimiento es legalmente viable.
¿En qué consiste la maternidad subrogada?
La maternidad subrogada es un acuerdo a través del cual una mujer, llamada gestante subrogada, acepta llevar a cabo un embarazo para otra persona o pareja, quienes serán los responsables legales del niño una vez nazca. La intención de este proceso es permitir que personas que por diversas circunstancias no pueden concebir hijos de manera natural, puedan convertirse en progenitores biológicos o legales.
Existen dos modalidades principales de maternidad subrogada:
1. Maternidad subrogada tradicional
En este caso, la gestante aporta también su material genético, es decir, el óvulo. Esto significa que la gestante es la madre biológica del bebé. Por ello, este tipo de subrogación plantea mayores implicaciones emocionales y legales, debido al vínculo genético entre la gestante y el niño.
2. Maternidad subrogada gestacional
Es la modalidad más utilizada y consiste en que el óvulo fecundado proviene de los futuros padres o de un donante de óvulos. En este caso, la gestante no tiene vínculo biológico con el bebé, ya que únicamente aporta su útero para llevar a cabo el embarazo.
Regulación de la maternidad subrogada en España
En España, la legislación vigente prohíbe expresamente este tipo de procedimientos. El artículo 10 de la Ley 14/2006 de reproducción humana asistida establece que los acuerdos de gestación por sustitución son nulos de pleno derecho. Según esta normativa, se considera que la madre legal de un niño nacido en estas condiciones es aquella que lo ha dado a luz.
Es importante destacar que, aunque la práctica está prohibida en territorio español, las personas que recurren a la maternidad subrogada en el extranjero enfrentan diferentes retos legales a su regreso, especialmente en cuanto al reconocimiento de la filiación del menor.
El proceso legal en el extranjero
Para todos aquellos que deciden realizar este procedimiento fuera de España, es fundamental analizar la legislación del país de destino. Países como Estados Unidos, Canadá, Grecia o Ucrania cuentan con normativas específicas que regulan esta práctica y protegen tanto a los futuros padres como a la gestante. Sin embargo, la situación legal varía significativamente entre países, lo que hace imprescindible contar con el asesoramiento adecuado para garantizar que el procedimiento se lleve a cabo de manera segura y respetando los derechos de todas las partes implicadas.
Entre los requisitos legales más comunes que suelen exigirse en otros países se encuentran:
- Que al menos uno de los padres de intención aporte material genético.
- La firma de un contrato legal que describa las obligaciones de la gestante y los derechos de los futuros padres.
- El cumplimiento de evaluaciones psicológicas y médicas tanto para la gestante como para los padres de intención.
Reconocimiento de la filiación en España
El reconocimiento legal de la filiación para niños nacidos a través de maternidad subrogada en el extranjero es un trámite complejo en España. Según la legislación vigente, una vez que los padres llegan al país con el recién nacido, deben iniciar los procedimientos legales para inscribir al menor en el Registro Civil, lo cual puede implicar:
- Presentar documentación del país de nacimiento del menor que acredite la filiación con los padres de intención.
- Solicitar la adopción del menor por parte del progenitor que no haya aportado material genético.
- Garantizar el respeto de los derechos del niño, como el acceso a la salud y la educación.
Es recomendable contar con el asesoramiento de abogados con experiencia en esta materia para evitar complicaciones en el proceso y garantizar que se cumplen todos los requisitos legales necesarios.
Puntos clave al considerar la maternidad subrogada
Ante un marco legal complejo como el español, resulta esencial recurrir a recursos confiables y profesionales. En Consultame.net, puedes contactar con abogados especializados en derecho de familia que te acompañarán en cada etapa del proceso, ya sea que desees informarte sobre las normativas locales o iniciar un proceso en el extranjero. Contar con expertos en la materia minimiza riesgos legales y asegura tranquilidad durante el procedimiento.
Aunque la maternidad subrogada plantea obstáculos legales y logísticos en España, también ofrece una esperanza tangible para personas y parejas que desean formar una familia. La clave está en contar con la información adecuada y garantizar que todos los aspectos éticos y legales sean considerados, protegiendo siempre los derechos del menor y de las partes implicadas en el proceso.