El expediente de dominio es un procedimiento de suma relevancia en el ámbito del derecho inmobiliario y registral en España, diseñado con el objetivo de regularizar situaciones relacionadas con inmuebles no registrados, errores en inscripciones o discrepancias en la titularidad. A raíz de reformas legislativas recientes, el proceso ha experimentado modificaciones significativas en cuanto a su forma de tramitación. La pregunta que muchos se plantean es: ¿el expediente de dominio se tramita por vía judicial o notarial? A continuación, en Consultame.net, te explicamos este tema clave desde una perspectiva actual y profesional.
¿Qué es el expediente de dominio?
El expediente de dominio es un procedimiento regulado por la legislación española que permite a los ciudadanos regularizar o rectificar la titularidad de un bien inmueble en el Registro de la Propiedad. Es útil en situaciones como la inmatriculación de un inmueble (es decir, su inscripción inicial en el registro), la reanudación del tracto sucesivo interrumpido o la rectificación de discrepancias en el registro.
Este mecanismo cobra especial importancia en España, un país donde una parte significativa del suelo rural históricamente no ha sido registrada adecuadamente, afectando la seguridad jurídica de los titulares.
Reformas de la Ley 13/2015 y el cambio de vía judicial a notarial
Con la entrada en vigor de la Ley 13/2015, de 24 de junio, de Reforma de la Ley Hipotecaria y del Texto Refundido de la Ley de Catastro Inmobiliario, se introdujo un cambio sustancial en el trámite del expediente de dominio. Antes del 1 de noviembre de 2015, este procedimiento podía realizarse tanto por la vía judicial como por la vía notarial. Sin embargo, dicha normativa desjudicializó varios procedimientos administrativos relacionados con el derecho inmobiliario y trasladó la responsabilidad de tramitar los expedientes de dominio exclusivamente a los notarios.
El principal objetivo de la reforma fue agilizar estos procedimientos, otorgar mayor seguridad a las partes interesadas y descargar de trabajo a los juzgados. Así, a partir de dicha reforma, la intervención del juzgado quedó eliminada para estos supuestos, otorgando a los notarios el protagonismo en la gestión de este trámite.
Puedes consultar el texto completo de la Ley 13/2015 en el Boletín Oficial del Estado.
Tramitación del expediente de dominio por vía notarial
Actualmente, cualquier expediente de dominio debe ser gestionado ante notario. Para ello, el interesado deberá presentar una solicitud formal acompañada de la documentación que justifique su interés legítimo, como escrituras o documentos que acrediten su derecho de titularidad sobre el inmueble.
Documentos esenciales para iniciar el trámite
Para iniciar el expediente de dominio ante notario, es común que se exija la siguiente documentación, aunque esta puede variar según el caso:
- Escrituras o títulos que acrediten la titularidad (si los hubiere).
- Certificación registral negativa del inmueble, cuando se trate de inmatriculaciones.
- Certificación catastral descriptiva y gráfica del inmueble.
- Identificación completa del solicitante y su vínculo con el inmueble.
- Cualquier otro documento que acredite la posesión o el derecho sobre el bien.
Una vez admitida la solicitud, el notario procederá a investigar y recopilar pruebas necesarias para acreditar la legitimidad del derecho del solicitante. En caso de no haber discrepancias ni oposiciones, emitirá una resolución favorable y el expediente será remitido al Registro de la Propiedad para su inscripción.
Importancia de consultar a profesionales especializados
El expediente de dominio puede convertirse en un procedimiento técnico, especialmente si surgen discrepancias, defectos formales o la oposición de terceros. Por esta razón, se recomienda siempre contar con el acompañamiento de abogados especializados en derecho registral que puedan garantizar que el trámite se realice de manera adecuada y efectiva.
En Consultame.net, puedes acceder a un equipo de abogados expertos en expedientes de dominio que resolverán tus dudas y te acompañarán en cada etapa del proceso, asegurando el cumplimiento de todos los requisitos legales y la defensa de tus intereses.
Si tienes dudas sobre si tu caso es apto para este procedimiento, no dudes en buscar asesoramiento legal para evitar contratiempos y proteger tus derechos sobre el inmueble.